Sensaciones de una linda noche
sábado, 4 de septiembre de 2010
El lenguaje de las miradas
Una vez más, Juan intenta decirle a a Javier, su padre, lo que acaba de ocurrirle hoy al salir de la escuela, pero su padre no contesta una palabra. Juan está descocertado, tiene a su padre frente a él, mirandole de frente, sus ojos se encuentran mirándole, pero no logran comunicarle nada, es como si Javier estuviera en otro lado. Juan le dice un par de cosas más, pero esta vez sin emitir sonido. Su mirada lo dice todo...
La forma de comunicación más conocida para el hombre es el lenguaje hablado y muchos coincidirán en que es el más usado. Yo me arriesgaría a decir que quizá el que más usemos sea el lenguaje de nuestros ojos... y es quizá el más sincero de todos... Aquel que pueda mentir con su mirada es además de uno de los seres más mentirosos; el mejor de los actores...
Nuestros ojos, aquellos que nos permiten ver los objetos, aquellos que nos hacen disfrutar de la realidad, esos mismos que nos hacen disfrutar de la gran gama de colores de la naturaleza, estos mismos nos permiten decir muchas cosas que aveces no podemos hacer con nuestra boca...lo que sucede es que hemos olvidado el arte de interpretar miradas... ese arte que teníamos cuando éramos niños, cuando sin necesidad de entender una palabra de nuestros progenitores, podíamos entender lo feliz que les hacía nuestra llegada al mundo, o cuando por razones externas que no entendíamos ellos estaban tristes, molestos o cansados.
Aún así, todavía podemos transmitir mensajes con nuestras miradas, mensajes que se crean en nuestra mente, que salen de nuestro ser, mensajes que pocas veces son recibidos y mucho menos entendidos.
Existen miradas de duda, miradas de odio, miradas de felicidad, miradas de dismulo, miradas que indican dirección, miradas que piden cariño, miradas que exigen explicaciones, hay miradas que se enamoran de otras miradas.
Hay miradas de celos, miradas de miedo, hay miradas prohibidas, las hay curiosas o miradas que piden un beso.
Hay miradas egoístas, miradas de resentimiento, hay miradas acusadorados, hay miradas que explican más de un sentimiento.
Hay miradas acompañadas de sonrisas, hay miradas tristes, hay miradas de esperanza, y miradas que auguran momentos grises.
Hay miradas tiernas, las hay coquetas, hay miradas tímidas, hay miradas hermosas, miradas inolvidables.
No existe un libro para aprender a descifrar miradas, no hay un manual que nos enseñe a actuar ante miradas que intentan decirnos algo o quizá todo. Pero las miradas son como los seres humanos, impredecibles, soñadoras, la mayor de las veces sincera, pero también las hay mentirosas.
Cada ser humano tiene un sistema decodificado de su lenguaje mediante miradas, solo cuando encuentras a la persona ideal aprendes que puedes leer las miradas y que tus miradas pueden ser entendidas. Sino te has fjado en las miradas, hoy pon un poco más de atención en las miradas que recibes y quizá puedas entender mejor a la persona que tienes al frente... sino sigue intentando, algún día entenderas el lenguaje de las miradas, solo confía en que puedes hacerlo...
Para terminar quiero decir que hay miradas que dicen Adiós, miradas que agradecen, miradas que dicen Te amo, si no lo has intentado aprende a decir Adiós con una mirada, sin resentimiento cada vez que entiendas que es mejor dejar que una persona abra sus alas y emprenda vuelo, aprende a decir gracias por todo lo que recibes, una mirada de agradecimiento es una regalo muy hermoso, pero principalmente aprende a no callar lo que sientes, no fuerces a tu mirada, si etás enamorado, deja que esa persona lo sepa, di a esa persona que amas, que la amas, aunque no siempre se lo digas, aprende que aveces una mirada de estas puede salvar cosas muy, pero muy preciadas...
A tí que con una mirada conquistaste mi corazón entero......
Luis Angel!!
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