H:
Papá, te fuiste de los que te amaban, mucho antes de lo que hubiéramos imaginado, te fuiste y uno piensa como aminorar el dolor en estas circunstancias, y el corazón no sabe como expresar todo el dolor, ni las lágrimas, ni el llanto, ni los gritos son suficientes...

Te fuiste y los recuerdos aparecen uno a uno como una avalancha de dardos envenenados, que hieren el alma, la misma que te añora, que te extraña, a ti, a tus sonrisas, a tus abrazos, a tu voz, o a tu sola presencia...

Te fuiste antes que nosotros, te nos adelantaste y aunque es lo correcto, que los hijos entierren a sus padres, creo que jamás hubieras deseado, que pasáramos por este dolor, es quizá lo único que puede consolarme en estos momentos, saber que soy yo el que sufre, que soy yo el que llora...

Amigo:
No soy capaz de siquiera de describir, el dolor que te embarga, el día que tenga que pasar por lo mismo, espero que estés ahí, aunque yo mismo no pude estar, mi egoísmo no puede ser más grande que esto...

Pudiera llenar este misiva de lamentos y de arrepentimientos por no haberme comportado como lo que siempre dije ser para ti-"como un Hermano", pero ya esta demás, no estuve allí, pero estoy aquí siempre...

Lo que quisiera es darte un abrazo y decirte que no es momento para lamentarse, que eres muy fuerte, aunque aveces no lo creas, que tu padre descansando está, no tengo ninguna razón para mentirte y decir que está en el cielo, que Dios lo recogió o esas cosas que dice la gente. Él descansa, duerme en el sueño eterno (o hasta que Dios nos despierte nuevamente) de la muerte, no sufre más, y su aliento de vida volvió a su origen, la fuente de energía, lo que llamamos Dios, y que es la fuente amor más pura.

Todos sus recuerdos están en la memoria de Dios y en el momento indicado él lo volverá a la Vida, así como hizo con Jesús, y entonces volverá a sonreír y volverá renovado, sin enfermedades, sin dolencias en un mundo mejor, el mundo que Dios tiene preparado para sus fieles Hijos, donde el llanto y el dolor serán cosas del pasado.

Donde el León Morará con el cordero y los niños jugarán en el agujero de las serpientes...
No pretendo consolarte, pretendo forjar en ti la esperanza, esa esperanza que solo está validada por la fé, un concepto poco fiable para la ciencia, si "H", sin esperanza, no somos más que máquinas frías y obsoletas.

LA ESPERANZA, es eso que ves en los ojos de tu pequeña, en su sonrisa, en sus delicadas caricias, y en sus inocentes gestos, es por eso que los niños, están mas cerca de Dios, en cambio cuando crecemos nos volvemos demasiado CIENTÍFICOS Y METODISTAS, que olvidamos lo místico, la imaginación y lo desconocido.

La muerte no es el enemigo que creemos, es la redención a nuestros pecados y debemos aprender a convivir con ella, hasta que llegue el momento, el momento de su propio deceso, y no nos corresponde a nosotros saber cuando será. Solo debemos tener esperanza y recordar a nuestros seres queridos que se encuentran durmiendo, porque solo así seguirán vivos dentro de nosotros, hasta que podamos acompañarlos en este sueño, o hasta que despiertan de él....

Perdón por no estar ahí cuando me necesitaste, pero donde me encuentre ten presente que el vinculo de nuestra amistad nos mantiene unidos a pesar de todo y que no es necesario, ocultar el dolor, no es de varones ocultar las lágrimas, solo se es más cobarde, así que cada vez que mal te sientas, aquí, está tu HERMANO.....SIEMPRE!!!
Atte

Luis Angel